Me gusta esto de hacer un blog porque es un buen indicativo de mis cambios de ánimo: temporalmente veo cuándo estoy trascendental y cuándo ociosa, cuándo no quiero pensar y cuándo me como la cabeza y llego a teorías extrañas y absurdas.
Siguiendo la línea en la que he estado últimamente, de no hacer nada serio, escribo esto (y para el que no sepa leer entre líneas se lo explico: mientras se me ocurre alguna rayada absurda o momento espiritual, os voy poniendo chorradas varias para que no os aburráis). Ya llegarán tiempos menos mundanos (coño, parezco Gandalf...).
El tema que hoy nos ocupa es el Pictionary, y es que hemos estado jugando en sedice (como no) y han aparecido auténticas obras de arte. Las reglas son simples, un dibujo en paint que representa un libro, personaje o lo que sea relacionado con la literatura de fantasía, y el que lo adivine, pone nuevo dibujo.
Siguiendo la línea en la que he estado últimamente, de no hacer nada serio, escribo esto (y para el que no sepa leer entre líneas se lo explico: mientras se me ocurre alguna rayada absurda o momento espiritual, os voy poniendo chorradas varias para que no os aburráis). Ya llegarán tiempos menos mundanos (coño, parezco Gandalf...).
El tema que hoy nos ocupa es el Pictionary, y es que hemos estado jugando en sedice (como no) y han aparecido auténticas obras de arte. Las reglas son simples, un dibujo en paint que representa un libro, personaje o lo que sea relacionado con la literatura de fantasía, y el que lo adivine, pone nuevo dibujo.
Para muestra, un botón. A ver si adivináis a qué libros se refieren.
He aquí esta maravilla hecha por Loren sobre Añoranzas y pesares de Tad Williams.
Y ahora uno que hizo que soltara una buena carcajada:
Es, ni más ni menos, que Esperanza del Venado de Orson Scott Card.
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